Como en el anuncio de Suchard, vuelvo a casa por Navidad, bueno en este caso vuelvo a mi blog que lo he tenido muy abandonado por enfadarme conmigo misma y con mi situación. Os pongo al día muy rápido, este año he sido una de las afectadas por algunos errores que yo no puedo controlar y que me ha supuesto trabajar más tarde y después cuando la suerte podría haber estado de mi lado y coger una plaza hasta final de curso...otro error incontrolable que no se puede ya corregir, que me hizo parar de nuevo en el CEIP La Paloma, en Azuqueca de Henares. Una visita muy fugaz, pero por segunda vez me hicieron sentir como en casa, mis paralelas maravillosas y el equipo de infantil increíble, un cole muy bien organizado, muy innovador y siempre creando buen rollo. El equipo directivo de 10. Se me hizo hasta raro sustituir a alguien que ya conocía, y me alegró saber que se recuperó muy rápido y bien. De verdad que me pongo a pensar y volver a un colegio que ya he estado trabajando, marcando todas las provincias, es algo así como que te toque la lotería y encima si es uno de los mejores colegios por los que he pasado y del que siempre hablo mil maravillas, pues ya es como que te toque el euromillón.
El problema es que ahora pienso así, pero antes no lo hice, el pensar qué iba a hacer con mi vida al no tener trabajo estable, después del año tan malo de salud que he pasado y con todos los problemas económicos que supone acabar con el paro e ir de un lugar a otro, que me costó llorar y llorar desconsolada buscando una solución, llegando incluso a pensar dejar la educación y ponerme a trabajar con mis padres de camarera. Un poco motivada por esas casualidades de caer en un cole que ya conocía y seguir rodeada de buena gente que me animaba día sí y día también ( por cierto gracias a toda la gente que me escribe por messenger preguntando por "mi desaparición bloguera"), empecé a recuperar algo la sonrisa y las ganas de seguir adelante con mi sueño de trabajar en lo que realmente me apasiona. De todas esas frases de ánimo me quedo con algo que me dijo una muy buena amiga , me dijo -¿te acuerdas cuando cambiaste de la rama sanitaria a la educativa y te pregunté los motivos?, pues bien yo le dije que quería ser maestra porque quiero estar siempre feliz y que me digan muchos te quieros, que me den abrazos y que me digan que guapa estoy todos los días jajaja ¡MOTIVAZOS! Nunca pensé que con todas las cosas que he pasado a lo largo de mi vida, con mi superación personal después de pasar muchas temporadas en hospitales, siempre positiva, siempre luchando... estos "errores incontrolados" me podían hacer caer y estar tan triste, tan apática, de no conocerme al mirarme al espejo.
Y como yo siempre intento buscarle el lado positivo a las cosas, pensé que gracias a que no me llamaran tan pronto, podría hacer otra especialidad que no tengo, que es primaria con la mención de audición y lenguaje, y así hice las prácticas en un colegio privado de Madrid, el SEK Santa Isabel, un cole fantástico del cual os hablaré en otra entrada porque se merece que veamos detenidamente el proyecto educativo que tiene y que para mi gusto es el modelo educativo a seguir a nivel curricular. Un claustro integrador y una tutora de prácticas sensacional que me hizo sentir como otra profe más del colegio porque no siempre se trata así de bien a alguien en prácticas y yo me siento afortunada por elegir ese colegio y por aprender muchísimas cosas. Pero a pesar de todo esto... todavía estaba ese "rum rum" en mi cabeza que no me dejaba ser "la mujer purpurina", esa que va dejando destellos de brillos y que contagia alegría por cualquier lugar, y la gente que me conoce me lo decía ¿Vero qué te pasa?
Y me puse a pensar que quizá este cúmulo de errores incontrolados sea porque me depara algo muy bueno, quizá la plaza dentro de poco o un destino más cerca de casa, algo bueno, estaba segura...estoy segura. Y así llegué a mi último destino, el CEIP Santa María la Blanca en Barcience (Toledo) del que me he despedido hoy, visita fugaz pero intensa. Un colegio que el primer día que entré por la puerta, me contagió la alegría que había perdido, volví a sentirme más yo, encontré a más personas que apuestan por una educación de calidad, innovadoras, alegres, en constante reciclaje, con ganas de aprender ¡incluso de mí!... y que a pesar de saber que yo no iba a durar ni dos semanas, me tendieron su mano y me han hecho sentirme aceptada y partícipe del grupo, algo que ayuda a seguir adelante, a trabajar, a volver a recuperar la ilusión. De verdad no os podéis imaginar lo que hace tener a gente tan llena de energía positiva a tu alrededor, hoy llegué a mi casa cargada de ese buen rollo a pesar de todas las cosas negativas que quizá tenga que afrontar ahora, pero no me importa, porque sigo pensando que al final estos "errores incontrolados" me hicieron encontrar a gente tan maravillosa, reencontrarme con otro cole al que le tengo tanto cariño, conocer la educación privada de cerca y volver a creer que hay personas que tienen un grandísimo corazón y se lo digo en especial a la persona que me acogió en su casa sin conocerme de nada y que hoy me ha traído para desayunar chocolate con churros ;)
Detallitos que alegran el alma. |
Me quedo con mi despedida de hoy, nunca me fui bailando de un colegio al ritmo de Camela jajaja ¡Sois la bomba!, ojalá volvamos a coincidir, ya sabéis que por aquí ando.
Para todos los que me habéis animado, aquellos que no me dejaron caer, mil gracias porque vuelvo al blog con más fuerza que nunca.
Hasta pronto ¡sean felices!
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